Los alumnos de Balears no han asumido las competencias básicas (entendiendo éstas como la capacidad de poner en práctica los conocimientos, de forma adecuada a un contexto) en Matemáticas, a juzgar por el avance de los datos de la Evaluación de Diagnóstico realizada el pasado mes de mayo a los estudiantes de 4º de Primaria y de 2º de ESO por el Institut d’Avaluació i Qualitat del Sistema Educatiu de les Illes Balears (IAQSE). La prueba también evaluaba las competencias en comunicación lingüística y en este caso los resultados fueron mejores, sobre todo en lo que se refiere a lengua catalana.
La consellera d’Educació, Bàrbara Galmés, presentó ayer este avance de resultados, aunque afirmó que no será hasta septiembre cuando se pueda contar con la radiografía definitiva, que permita orientar las políticas educativas de los centros. Según estos resultados provisionales -que, hay que recordar, no miden el grado de conocimiento en estas materias- declaró que el grado alcanzado en competencias lingüísticas «es más que aceptable en las tres lenguas», con un 65.6 (sobre 100) en el caso de catalán y un 62.4 en castellano en Enseñanza Secundaria Obligatoria y un 70.1 y un 57.1, respectivamente en Primaria. En cambio «en matemáticas no se llega al 50 y hace falta reflexionar e intervenir». Los resultados son algo mejores en el caso de los centros privados y en el caso de las niñas en las lenguas.
La consellera d’Educació, Bàrbara Galmés, presentó ayer este avance de resultados, aunque afirmó que no será hasta septiembre cuando se pueda contar con la radiografía definitiva, que permita orientar las políticas educativas de los centros. Según estos resultados provisionales -que, hay que recordar, no miden el grado de conocimiento en estas materias- declaró que el grado alcanzado en competencias lingüísticas «es más que aceptable en las tres lenguas», con un 65.6 (sobre 100) en el caso de catalán y un 62.4 en castellano en Enseñanza Secundaria Obligatoria y un 70.1 y un 57.1, respectivamente en Primaria. En cambio «en matemáticas no se llega al 50 y hace falta reflexionar e intervenir». Los resultados son algo mejores en el caso de los centros privados y en el caso de las niñas en las lenguas.
Uno de los factores que más diferencias marca es el nivel de estudios de los padres, que puede llegar a ser hasta de 17 puntos entre los hijos de padres sin estudios o con estudios universitarios. Pero a estos resultados hay que integrarles aún las variables de contexto social y familiar, razón por la que el director del IAQSE, Miquel Sbert, fue muy claro al afirmar que «no son buenos, ni malos, son los que son y analizarlos como final de proceso es un absurdo, e incluso hacerlo como un síntoma es discutible». Más aun, aclaró que «estos resultados miden capacidades y, por eso, asociarlos con aprobados o suspensos es un error».
2 comentarios:
Más de la mitad de los alumnos llega al segundo curso de Secundaria sin saber aplicar y manejar conceptos matemáticos básicos relacionados con números y operaciones, álgebra, geometría, funciones y gráficas, y estadística y probabilidad.
En esta materia, y precisando más, un 66,8% de los jóvenes encuestados no tiene asumidas las competencias básicas.
En total, 21143 jóvenes han sido objeto de evaluación en el archipiélago en estas pruebas que se han centrado en Matemáticas y en la Comunicación Lingüística en castellano, catalán e inglés.
En 4º los resultados obtenidos en Matemáticas son prácticamente idénticos, con casi seis de cada diez alumnos que no tienen asumidas las competencias básicas. La consellera de Educación, Bárbara Galmés, reconoció que estos porcentajes que superan a la mitad del alumnado invitan a la "reflexión e intervención". Hizo especial hincapié en que esto no es cuestión de competir, ni aprobar ni suspender sino de "conocer para actuar".
En este primer avance del estudio realizado por el Institut d´Avaluació i Qualitat del Sistema Educatiu (IAQSE) se hacen patentes algunas diferencias según varios factores, como el nivel de estudio de los padres (diferencias que superan los 20 puntos porcentuales entre los progenitores que no tienen estudios y los que son universitarios). Gener subrayó que para valorar los datos es necesario contar con el índice SEC o de contexto sociocultural.
Los alumnos pitiusos son competentes en conocimientos lingüísticos, pero las matemáticas se les atragantan. Es la conclusión que se puede extraer del avance de los primeros datos de la evaluación de diagnóstico efectuada en todos los centros de Balears de cuarto de Primaria y segundo de Secundaria.
Los resultados no dejan lugar a dudas de que los alumnos pitiusos y baleares tienen problemas con los números y las operaciones: en segundo de educación Secundaria, la media balear es de 43,2 sobre 100 puntos, mientras que la de Ibiza y Formentera es la ´nota´ más baja (41,2) de las cuatro islas. En cuarto de educación Primaria, los resultados son similares: 42,1 de media balear y 40,8 de la pitiusa, sólo por encima de Menorca.
En competencias lingüísticas (de catalán, castellano e inglés), los alumnos de Primaria y Secundaria se desenvuelven mejor: en Primaria, las Pitiusas están a la cola de la media balear en lengua catalana (64,4, lo que supone 5,7 puntos menos) y en lengua castellana (54, por 57,1 de Balears), aunque en inglés se hallan a la cabeza (53,9). En segundo de Secundaria, ibicencos y formenterenses ocupan el segundo lugar entre islas en lengua catalana (66,3) e inglés (58,8) y el primero en castellana (64,3).La Directora General de Administración, Ordenación e Inspección Educativa, Maria Gener, insistió ayer en la idea de que estos datos «no se pueden interpretar en términos de suspenso, pues no miden conocimientos, sino competencias». Gener recalcó ayer que los alumnos y alumnas «están acostumbrados a trabajar en contenidos, pero no en competencias», por lo que «hay que tener cuidado porque esos datos pueden dar a entender que no saben matemáticas, que no es lo mismo que no saber aplicarlas en situaciones más complejas y de la vida cotidiana. Quizás se deba a que lo han trabajado poco». Las competencias «se empiezan a adquirir en Primaria y se consolidan en Secundaria», advierte Gener.
A su juicio, los datos de la evaluación «aportan unas tendencias». Por ejemplo, que «en competencia matemática hay que reflexionar y mejorar» e incluso «habrá que ver qué está ocurriendo». En cambio, «en las materias lingüísticas la tendencia es que los alumnos son más competentes». Y de todo ello extrae dos conclusiones: «Que en matemáticas andamos más flojos que en las otras materias» y que «los resultados son bastante aceptables». «Mejores –añade la Directora de Inspección Educativa– no los esperábamos pues en todas las evaluaciones que hacemos de matemáticas siempre andamos regularcillo. En esa materia eran previsibles».
En septiembre, los centros recibirán, en formato PDF, las puntuaciones obtenidas pasadas a una escala TRI (Teoría de Respuesta al Item), que aportará datos sobre lo que saben hacer los alumnos y qué dominan o no, así como la distribución del alumnado en cada tramo (muy bajo, bajo, aceptable, alto y muy alto). Los centros podrán comparar su escala TRI con el global de Balears. Los resultados facilitados ayer, que de momento «son poco interpretables», según Gener, adquirirán en septiembre otra dimensión: «Entonces sabremos, incluso de cada alumno, no sólo la media que tiene, sino en qué aspectos necesita mejorar y en cuales va bien. Eso nos dará pistas para actuar».
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