Transcribo una entrevista aparecida el el periódico digital: www.eldiariomontanes.es, realizada a Francisco Santos, matemático y director del Centro Internacional de Encuentros Matemáticos. - ¿Qué ve de atractivo un matemático en las matemáticas?
-Muchas cosas. Empieza cuando uno estudia. Le gustan las matemáticas por lo que tienen de ordenador. Aquí las cosas son como son, no hay medias tintas y hay a quien eso le atrae.
- ¿Y cómo pueden hacerse atractivas para la gente?
-Ésta es la pregunta del millón. Yo estoy convencido de que las matemáticas son atractivas y creo que a la gente si le das ciertas matemáticas les gustan. No hay más que ver, por ejemplo, el éxito que han tenido los sudokus en los periódicos últimamente u otro tipo de pasatiempos mentales como los de la Nintendo DS. En el fondo, casi todo lo que hacen son matemáticas. A la gente le gustan las matemáticas pero le asustan.
- Ni que lo diga...
- Es una cosa un poco social porque a los niños ya les decimos desde pequeños que las matemáticas son muy difíciles y se lo terminan creyendo. La matemáticas son más importantes de lo que pensamos y todo el mundo las utiliza todos los días. La cantidad de matemáticas que usamos todos los días sin darnos cuenta es increíble.
- ¿Tiene alguna vez la sensación de que sus alumnos le miran como si les estuviera hablando en chino?
- Eso te pasa, sí. Ahora por suerte o por desgracia hay pocos alumnos en la carrera de matemáticas entonces uno se da más cuenta de cuándo le siguen los alumnos y cuándo no. Solemos tener trucos. Por ejemplo, fijarnos en determinados alumnos que sabemos que se les nota más si están entendiendo o no.
- ¿Qué salidas tiene un matemático?
- Tradicionalmente está la enseñanza aunque hoy en día no es donde más se colocan los matemáticos. Hay muchas cosas relacionadas con la informática, con modelización, con economía, finanzas.
- ¿Por qué cree que es, en muchos casos, la asignatura pendiente de muchos chavales?
- Yo creo que en matemáticas las cosas son blancas o negras por lo que es más difícil esconder lo que no sabes mientras que, a lo mejor en biología si te preguntan algo de los anfibios todo el mundo sabe algo de los anfibios. Las matemáticas son más drásticas y quizá eso es lo que produce más rechazo. Frustra más a lo mejor.
- ¿Hay que tener algún don especial para ser matemático? ¿Están hechos ustedes de otra pasta?
- Yo creo que no estamos hechos de otra pasta. El único don que tienes que tener para ser matemático es que te gusten las matemáticas. ¿Qué hace falta para que te gusten las matemáticas? Eso no lo sé.
- Hace ya tres años que se implantó el Centro Internacional de Encuentros Matemáticos (CIEM) en Castro. ¿Tiene futuro?
- Yo quiero pensar que sí porque ha ido creciendo, ha ido a más. Este año hemos llegado a 15 encuentros y más de 800 participantes, de ellos, casi la mitad son extranjeros que han pasado por Castro. Eso es bueno para Castro y para el CIEM.
- ¿Se renovará el convenio entre el Ayuntamiento y la Universidad de Cantabria?
- Sí. Tenemos un pequeño tira y afloja con el Ayuntamiento porque ellos tienen sus intereses y en concreto La Residencia se está usando para varias cosas y el CIEM compite con las otras cosas.
- ¿Qué diría a los padres que llevan a sus hijos a clases particulares de matemáticas?
- Que les motiven pero que intenten no agobiarles.
- ¿Y a los alumnos?
- Que vayan poco a poco y que intenten no frustrarse. No tirar la toalla y que sean conscientes de que es cierto que las matemáticas son necesarias. A veces tenemos la percepción de que las matemáticas nos complican la vida pero es al contrario, nos la simplifican. Llevamos una vida tan complicada que sería imposible vivirla sin matemáticas.
-Muchas cosas. Empieza cuando uno estudia. Le gustan las matemáticas por lo que tienen de ordenador. Aquí las cosas son como son, no hay medias tintas y hay a quien eso le atrae.
- ¿Y cómo pueden hacerse atractivas para la gente?
-Ésta es la pregunta del millón. Yo estoy convencido de que las matemáticas son atractivas y creo que a la gente si le das ciertas matemáticas les gustan. No hay más que ver, por ejemplo, el éxito que han tenido los sudokus en los periódicos últimamente u otro tipo de pasatiempos mentales como los de la Nintendo DS. En el fondo, casi todo lo que hacen son matemáticas. A la gente le gustan las matemáticas pero le asustan.
- Ni que lo diga...
- Es una cosa un poco social porque a los niños ya les decimos desde pequeños que las matemáticas son muy difíciles y se lo terminan creyendo. La matemáticas son más importantes de lo que pensamos y todo el mundo las utiliza todos los días. La cantidad de matemáticas que usamos todos los días sin darnos cuenta es increíble.
- ¿Tiene alguna vez la sensación de que sus alumnos le miran como si les estuviera hablando en chino?
- Eso te pasa, sí. Ahora por suerte o por desgracia hay pocos alumnos en la carrera de matemáticas entonces uno se da más cuenta de cuándo le siguen los alumnos y cuándo no. Solemos tener trucos. Por ejemplo, fijarnos en determinados alumnos que sabemos que se les nota más si están entendiendo o no.
- ¿Qué salidas tiene un matemático?
- Tradicionalmente está la enseñanza aunque hoy en día no es donde más se colocan los matemáticos. Hay muchas cosas relacionadas con la informática, con modelización, con economía, finanzas.
- ¿Por qué cree que es, en muchos casos, la asignatura pendiente de muchos chavales?
- Yo creo que en matemáticas las cosas son blancas o negras por lo que es más difícil esconder lo que no sabes mientras que, a lo mejor en biología si te preguntan algo de los anfibios todo el mundo sabe algo de los anfibios. Las matemáticas son más drásticas y quizá eso es lo que produce más rechazo. Frustra más a lo mejor.
- ¿Hay que tener algún don especial para ser matemático? ¿Están hechos ustedes de otra pasta?
- Yo creo que no estamos hechos de otra pasta. El único don que tienes que tener para ser matemático es que te gusten las matemáticas. ¿Qué hace falta para que te gusten las matemáticas? Eso no lo sé.
- Hace ya tres años que se implantó el Centro Internacional de Encuentros Matemáticos (CIEM) en Castro. ¿Tiene futuro?
- Yo quiero pensar que sí porque ha ido creciendo, ha ido a más. Este año hemos llegado a 15 encuentros y más de 800 participantes, de ellos, casi la mitad son extranjeros que han pasado por Castro. Eso es bueno para Castro y para el CIEM.
- ¿Se renovará el convenio entre el Ayuntamiento y la Universidad de Cantabria?
- Sí. Tenemos un pequeño tira y afloja con el Ayuntamiento porque ellos tienen sus intereses y en concreto La Residencia se está usando para varias cosas y el CIEM compite con las otras cosas.
- ¿Qué diría a los padres que llevan a sus hijos a clases particulares de matemáticas?
- Que les motiven pero que intenten no agobiarles.
- ¿Y a los alumnos?
- Que vayan poco a poco y que intenten no frustrarse. No tirar la toalla y que sean conscientes de que es cierto que las matemáticas son necesarias. A veces tenemos la percepción de que las matemáticas nos complican la vida pero es al contrario, nos la simplifican. Llevamos una vida tan complicada que sería imposible vivirla sin matemáticas.
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