Qué bueno que se reconozca a la educación no sólo como una prioridad, sino además, como la puerta para que México tenga un futuro promisorio que todos deseamos.
Pero sí especificamos todavía más lo que debe caracterizar a esa educación para que sea de la calidad, que ha permitido a otros países destacar en su crecimiento y desarrollo socioeconómico, llegamos al tema de la formación de los educandos para que tengan un pensamiento crítico, creativo, innovador, con habilidades para aprender a aprender de manera continua, que dominen herramientas estratégicas para acceder con ventaja, al mundo de la ciencia avanzada, de la tecnología de punta y del mercado globalizado, como lo son: el inglés, la informática y las matemáticas.
En el pasado y todavía en algunas regiones rezagadas del mundo y de México, el analfabetismo era la barrera principal para salir de la pobreza y el subdesarrollo. Pero ahora, surge lo que se ha llamado analfabetismo funcional, que en sentido estricto se refiere a la limitación de las personas que sabiendo leer y escribir; no aplican estas habilidades en su desarrollo.
En sentido amplio, se están considerando otros tipos de analfabetismo funcional, como lo son el no saber utilizar los ordenadores personales y no estar al día en la aplicación, para la educación, trabajo y vida diaria, de las herramientas de la informática.
Este es el mismo caso del dominio de idioma inglés. Pues en un mundo donde las cosas importantes se difunden y se hacen en inglés, no tener un dominio aceptable del mismo, resulta en segregación y pérdida de oportunidades.
Por eso es tan visionaria la propuesta y tan trascendente el trabajo del gobernador Eugenio Hernández, en hacer de Tamaulipas el primer estado bilingüe. A este proyecto se están aplicando las instituciones educativas y se han sumado otras instancias como el diario La Verdad, que esta realizando un seguimiento cercano a este proceso, informando a la comunidad de su avance y resaltando su importancia.
Pero ahora toca hacer mención de la importancia de las Matemáticas, como otra herramienta estratégica con la que tenemos que armar a las nuevas generaciones.
Atrás deben de quedar los mitos y complejos de que “son muy difíciles”, de que "son aburridas”, de que “el mexicano no tiene capacidad para ellas”, o de que “en la vida práctica son inútiles”. Simplemente los países más avanzados y los profesionales más creativos, productivos y exitosos, tienen un sólido conocimiento matemático.
Sin Matemáticas no se puede abrir la puerta grande de las ciencias y de la tecnología, pero tampoco las de la alta economía, las finanzas, la comunicación y aún de las áreas antes consideradas vírgenes o alérgicas a las matemáticas, como son la Medicina, las Humanidades, el Arte y hasta la Política.
Aceptemos la realidad: sin un aceptable domino de la informática, del inglés y de las Matemáticas, seremos los analfabetos funcionales de este siglo.
El ejemplo ya nos lo puso Luis Brando Guzmán Navarrete, un joven tamaulipeco, estudiante del CEBTIS 24 que obtuvo el segundo lugar en la XXIII Olimpiada Nacional de Matemáticas 2009. No fue un golpe de suerte, porque es la tercera vez consecutiva que logra un lugar destacado en estas competencias. Las medallas de oro, plata y bronce, se la llevaron alumnos de modestas escuelas del estado de Oaxaca, que regresaron como héroes a su pueblo Xoxotlán, como prueba viva de que con estudio, y disciplina, las Matemáticas son el camino para alcanzar el desarrollo.
A nivel internacional existen otros ejemplos similares porque, en la XXIV Olimpiada Iberoamericana de Matemáticas, efectuada en México, en la que participaron estudiantes de 21 países, fue Cuba quien obtuvo una medalla de oro y tres de bronce.
Por otra parte, en la Olimpiada Internacional de Matemáticas realizada en Madrid, España, en julio del 2008, estudiantes peruanos ganaron la medalla de oro, tres de plata y una de bronce. México obtuvo una medalla de bronce. Por equipos, ganó la aplanadora china, cuyos jóvenes con la máxima puntuación de 217, volvieron a casa cargados de premios: cinco medallas de oro, y una de plata, superando a Rusia y Estados Unidos. Tampoco fue un golpe de suerte porque es la octava vez de las últimas diez que China gana el primer lugar.
Lo dicho, las Matemáticas debe ser nuestro lenguaje. En Tamaulipas hay madera y talento. Los jóvenes están poniendo el ejemplo. Los adultos y aún los muy adultos, deben dejar los pretextos, están invitados a tomar este reto. Si es que se quiere ser parte de este siglo.
Pero sí especificamos todavía más lo que debe caracterizar a esa educación para que sea de la calidad, que ha permitido a otros países destacar en su crecimiento y desarrollo socioeconómico, llegamos al tema de la formación de los educandos para que tengan un pensamiento crítico, creativo, innovador, con habilidades para aprender a aprender de manera continua, que dominen herramientas estratégicas para acceder con ventaja, al mundo de la ciencia avanzada, de la tecnología de punta y del mercado globalizado, como lo son: el inglés, la informática y las matemáticas.
En el pasado y todavía en algunas regiones rezagadas del mundo y de México, el analfabetismo era la barrera principal para salir de la pobreza y el subdesarrollo. Pero ahora, surge lo que se ha llamado analfabetismo funcional, que en sentido estricto se refiere a la limitación de las personas que sabiendo leer y escribir; no aplican estas habilidades en su desarrollo.
En sentido amplio, se están considerando otros tipos de analfabetismo funcional, como lo son el no saber utilizar los ordenadores personales y no estar al día en la aplicación, para la educación, trabajo y vida diaria, de las herramientas de la informática.
Este es el mismo caso del dominio de idioma inglés. Pues en un mundo donde las cosas importantes se difunden y se hacen en inglés, no tener un dominio aceptable del mismo, resulta en segregación y pérdida de oportunidades.
Por eso es tan visionaria la propuesta y tan trascendente el trabajo del gobernador Eugenio Hernández, en hacer de Tamaulipas el primer estado bilingüe. A este proyecto se están aplicando las instituciones educativas y se han sumado otras instancias como el diario La Verdad, que esta realizando un seguimiento cercano a este proceso, informando a la comunidad de su avance y resaltando su importancia.
Pero ahora toca hacer mención de la importancia de las Matemáticas, como otra herramienta estratégica con la que tenemos que armar a las nuevas generaciones.
Atrás deben de quedar los mitos y complejos de que “son muy difíciles”, de que "son aburridas”, de que “el mexicano no tiene capacidad para ellas”, o de que “en la vida práctica son inútiles”. Simplemente los países más avanzados y los profesionales más creativos, productivos y exitosos, tienen un sólido conocimiento matemático.
Sin Matemáticas no se puede abrir la puerta grande de las ciencias y de la tecnología, pero tampoco las de la alta economía, las finanzas, la comunicación y aún de las áreas antes consideradas vírgenes o alérgicas a las matemáticas, como son la Medicina, las Humanidades, el Arte y hasta la Política.
Aceptemos la realidad: sin un aceptable domino de la informática, del inglés y de las Matemáticas, seremos los analfabetos funcionales de este siglo.
El ejemplo ya nos lo puso Luis Brando Guzmán Navarrete, un joven tamaulipeco, estudiante del CEBTIS 24 que obtuvo el segundo lugar en la XXIII Olimpiada Nacional de Matemáticas 2009. No fue un golpe de suerte, porque es la tercera vez consecutiva que logra un lugar destacado en estas competencias. Las medallas de oro, plata y bronce, se la llevaron alumnos de modestas escuelas del estado de Oaxaca, que regresaron como héroes a su pueblo Xoxotlán, como prueba viva de que con estudio, y disciplina, las Matemáticas son el camino para alcanzar el desarrollo.
A nivel internacional existen otros ejemplos similares porque, en la XXIV Olimpiada Iberoamericana de Matemáticas, efectuada en México, en la que participaron estudiantes de 21 países, fue Cuba quien obtuvo una medalla de oro y tres de bronce.
Por otra parte, en la Olimpiada Internacional de Matemáticas realizada en Madrid, España, en julio del 2008, estudiantes peruanos ganaron la medalla de oro, tres de plata y una de bronce. México obtuvo una medalla de bronce. Por equipos, ganó la aplanadora china, cuyos jóvenes con la máxima puntuación de 217, volvieron a casa cargados de premios: cinco medallas de oro, y una de plata, superando a Rusia y Estados Unidos. Tampoco fue un golpe de suerte porque es la octava vez de las últimas diez que China gana el primer lugar.
Lo dicho, las Matemáticas debe ser nuestro lenguaje. En Tamaulipas hay madera y talento. Los jóvenes están poniendo el ejemplo. Los adultos y aún los muy adultos, deben dejar los pretextos, están invitados a tomar este reto. Si es que se quiere ser parte de este siglo.
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