La Organización Mundial de la Salud (OMS) aseguró este viernes que el cierre de los centros escolares es una medida preventiva para evitar contagios por gripe A que podría reducir la presión asistencial en hospitales y centros de salud entre un 30 y un 50 por ciento durante el pico de la pandemia, previsto para los meses de otoño e invierno.
Según la OMS, esta medida sería efectiva si los Gobiernos la llevan a cabo antes de que el 1 por ciento de los escolares esté infectado. Sin embargo, si se cierra el colegio cuando se ha infectado más del 1 por ciento de los escolares la reducción del número de contagios y el control del virus A/H1N1 "será muy limitado", apuntó la organización en un comunicado.
En este sentido, la OMS coincide con el Ministerio de Sanidad español en recomendar que, tanto profesorado como alumnado, extremen las medidas de higiene, se queden en casa si presentan síntomas, y permanezcan en una habitación separada del resto si detectan síntomas mientras están en el colegio, hasta que vengan a recogerles.
Asimismo, una vez se cierre el colegio, "también se deben tomar medidas para evitar el contacto entre los niños fuera del mismo", señalaron. "Si los estudiantes no van al colegio pero se congregan en otros lugares, el virus continuará expandiéndose y los beneficios del cierre de la escuela se verán anulados", explicaron.
No obstante, la OMS quiso aclarar que, aunque los colegios son un vector importante en la expansión del virus, no se pueden hacer recomendaciones a nivel global. "Es muy importante aplicar estas medidas siempre teniendo en cuenta el contexto específico" de cada país, subrayaron. El cierre de colegios puede provocar "costes económicos y sociales desproporcionados en comparación con los potenciales beneficios" para la salud de las comunidades, señaló este organismo. De hecho, "diversos estudios vaticinan que la clausura de los colegios puede provocar un absentismo laboral del 16 por ciento --si los padres se quedan en casa cuidando de sus hijos, enfermos o no-- a lo que habría que sumar las propias bajas producidas por los adultos infectados", explicaron.
Asimismo, la OMS señaló que, aunque el cierre de las escuelas reduciría la presión asistencial durante el pico de la pandemia, paradójicamente se produciría una falta de profesionales sanitarios, ya que muchos de los doctores y enfermeras tienen hijos y tendrían que quedarse en casa para cuidarles durante la enfermedad.
Según la OMS, esta medida sería efectiva si los Gobiernos la llevan a cabo antes de que el 1 por ciento de los escolares esté infectado. Sin embargo, si se cierra el colegio cuando se ha infectado más del 1 por ciento de los escolares la reducción del número de contagios y el control del virus A/H1N1 "será muy limitado", apuntó la organización en un comunicado.
En este sentido, la OMS coincide con el Ministerio de Sanidad español en recomendar que, tanto profesorado como alumnado, extremen las medidas de higiene, se queden en casa si presentan síntomas, y permanezcan en una habitación separada del resto si detectan síntomas mientras están en el colegio, hasta que vengan a recogerles.
Asimismo, una vez se cierre el colegio, "también se deben tomar medidas para evitar el contacto entre los niños fuera del mismo", señalaron. "Si los estudiantes no van al colegio pero se congregan en otros lugares, el virus continuará expandiéndose y los beneficios del cierre de la escuela se verán anulados", explicaron.
No obstante, la OMS quiso aclarar que, aunque los colegios son un vector importante en la expansión del virus, no se pueden hacer recomendaciones a nivel global. "Es muy importante aplicar estas medidas siempre teniendo en cuenta el contexto específico" de cada país, subrayaron. El cierre de colegios puede provocar "costes económicos y sociales desproporcionados en comparación con los potenciales beneficios" para la salud de las comunidades, señaló este organismo. De hecho, "diversos estudios vaticinan que la clausura de los colegios puede provocar un absentismo laboral del 16 por ciento --si los padres se quedan en casa cuidando de sus hijos, enfermos o no-- a lo que habría que sumar las propias bajas producidas por los adultos infectados", explicaron.
Asimismo, la OMS señaló que, aunque el cierre de las escuelas reduciría la presión asistencial durante el pico de la pandemia, paradójicamente se produciría una falta de profesionales sanitarios, ya que muchos de los doctores y enfermeras tienen hijos y tendrían que quedarse en casa para cuidarles durante la enfermedad.
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