El Departamento de Educación desarrollará en abril y mayo las pruebas de nivel a cerca de 25000 alumnas y alumnos de cuarto de Primaria y segundo de ESO, que tienen como objetivo detectar y corregir fallos en el sistema educativo. Por segundo año consecutivo se examinarán de matemáticas y lengua y, por primera vez, de artes y tecnologías. Además, y como ocurriese el curso anterior, algunos centros evaluará también a su alumnado de idiomas.
Los alumnos y alumnas con necesidades educativas especiales de los centros donde se desarrollen las pruebas (públicos, privados o concertados), así como los escolarizados en España desde hace menos de un curso y que no hablen español, serán los únicos excluídos.
Los resultados de estas pruebas, confidenciales y sin efecto alguno sobre las notas del alumnado, sirven para diagnosticar los puntos frágiles del sistema educativo y rediseñar y aplicar nuevas políticas para mejorar la calidad educativa.
Además de las acciones comunes, cada colegio o instituto elaborará un documento de mejora de su plan de estudios en función de las debilidades detectadas.
Estos exámenes, que se llevan a cabo de año en año, comenzaron ya el curso pasado y, a lo largo de tres años, se evaluará en diferentes áreas para abordar todas las competencias básicas.
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